Telediagnóstico: Leyendo la mente...


Hace mucho tiempo que no me ponía con esta sección, porque no sé muy bien cómo enfocarla. Entradas como la última a mí me parecen interesantes y que pueden ser algo útiles para los que nos vemos en esto de la Sanidad, pero no sé yo si a los demás os interesa lo más mínimo... Pensé en cambiar el enfoque, pero no se me ocurría y cómo y, al final, hace unos días, decidí abandonarla. Pero el martes estava yo viendo House y hablaron de algo muy curios así que me dije "¿Qué, lo escribo en Telediagnóstico?"; ya véis, al final me decidí por el sí, y éste es el resultado*

Si estáis siguiendo House, ya sea a ritmo de USA o de cadenas nacionales, seguro que ya habéis visto el capítulo 6x15: Black hole (Agujero negro). En este caso, no voy a hablaros del diagnóstico de la chica protagonista (una rara infección), ni del proceso que se sigue para llegar a él... me voy a centrar en una única prueba: la resonancia magnética funcional (RMNf).

¿Y por qué hablaros sólo de una prueba? La razón es que viendo el capítulo me acordé de esta entrada de hace unos meses, donde os hablaba de una nueva prueba (o, más bien, una nueva aplicación a una prueba ya existente) con la que sería posible leer la mente. Os lo resumo brevemente...

La prueba se divide en dos fases: en la primera, de unas dos horas de duración, el paciente se sienta y se le hacen ver una serie de imágenes y vídeos mientras, a través de una RMNf a la que se le conecta, envía sus señales neuronales a un procesador. Allí, el ordenador las procesa y hace un pequeño mapa del cerebro del paciente, señalando las estructuras que se activan al ver las imágenes y reconociendo su circuito de reconocimiento. En una segunda fase, se incita al paciente a dejar libre la imaginación y focalizarla en un único pensamiento: la primera imágen que venga, un recuerdo, un sueño, un objeto... Entonces, el ordenador compara las áreas que se activan ahora con las de la primera fase y es capaz de realizar un vídeo que reproduce, no exactamente pero sí de forma muy aproximada, lo que el paciente está pensando.  Por ejemplo, si al principio le hemos enseñado una pelota y personas, y el paciente después se recuerda jugando a pelota con su padre, el ordenador reconocerá dos "imágenes cerebrales", la pelota y las personas (el padre y el paciente).

Pues bien, esto fue exactamente lo que se vio en el capítulo, si bien la máquina recibía otro nombre y no funcionaba exactamente igual. En este caso querían saber qué soñaba la paciente, y tras varias horas de pensamiento libre, la paciente se durmió y soñó, y pudieron reconocerla de la mano de un hombre (eso sí, en un vídeo muy borroso y sin apenas detalles). El por qué esto era importante para el diagnóstico os lo ahorro, porque no sirvió para mucho, pero me pareció curioso poder hablaros de esta aplicación práctica de mi anterior entrada y deciros que, a veces, la realidad supera a la ficción.

* sé que a muchos sí os gusta esta sección, pero no sé si lo estaba contando de la forma adecuada así que, por favor, dadme vuestras críticas y opiniones y prometo mejorar.

... y la respuesta no se hizo esperar

Desde Público.es llega, en pocas horas, la respuesta de Power Balance, así que antes de irme a la cama, os dejo el otro lado de la noticia para animar el debate...

Power Balance España, con sede en Marbella (Málaga), ha negado hoy que venda pulseras como medicamentos y que les atribuyan facultades "pseudomilagrosas", tal y como ha denunciado la organización FACUA.

En un comunicado, la compañía ha asegurado que nunca ha recomendado su producto con fines sanitarios, así como que la tecnología de la pulsera "ni es un medicamento ni pretende serlo", por lo que no la considera sujeta a la regulación de la Ley del Medicamento, tal y como ha señalado hoy FACUA en una nota. Asimismo, ha recordado que la demanda de la asociación ante las autoridades sanitarias se dirige "contra defectos en la publicidad emitida" y "en ningún caso" contra el uso del producto.

Los responsables de Power Balance han lamentado que FACUA no se haya puesto en contacto con ellos "a fin de aclarar previamente las discrepancias demandadas" y ha asegurado que emprenderá "las acciones legales y comerciales adecuadas y necesarias para proteger su tecnología, su marca y su prestigio".

Denunciadas las "Power Balance" a las autoridades sanitarias

Breve noticia con la que me he encontrado hoy a través de Twitter...

FACUA-Consumidores en Acción ha denunciado a la empresa Power Balance España por atribuir propiedades seudomilagrosas a sus pulseras y otros productos como colgantes, tarjetas plásticas y pegatinas.

Las denuncias han sido remitidas, entre otros organismos, a la Dirección General de Salud Pública y Sanidad Exterior del Ministerio de Sanidad y Política Social y la Secretaría General de Salud Pública de la Junta de Andalucía.

En su publicidad, la empresa asegura que sus productos contienen un holograma con una frecuencia que "brinda al cuerpo nuevamente un estado de armonía y equilibrio como lo tuvo antes de la contaminación por sustancias químicas, comidas rápidas, la falta de ejercicio y el estrés". Power Balance asegura que con sus artículos se logra el "aumento del equilibrio, la fuerza, flexibilidad, resistencia, enfoque, coordinación y ritmo".

FACUA argumenta en sus denuncias que la empresa vulnera el Real Decreto 1.907/1996, de 2 de agosto, sobre publicidad y promoción comercial de productos, actividades o servicios con pretendida finalidad sanitaria. La citada norma prohíbe la publicidad de productos, materiales, sustancias, energías o métodos "que sugieran o indiquen que su uso o consumo potencian el rendimiento físico, psíquico, deportivo o sexual (...) sin ajustarse a los requisitos y exigencias previstos en la Ley del Medicamento".

La publicidad de Power Balance también incurre en otra práctica prohibida en dicho Real Decreto, al ofrecer "testimonios de personas famosas o conocidas por el público". En ella aparecen famosos como el tensita Manolo Santana, los surfistas Pablo Gutiérrez y Courtney Conlogue, la corredora de Four Corss Eva Castro, el baloncestista Shaquille O'neal y el piloto de Fórmula 1 Rubens Barrichello. En la tienda online de la empresa, un supuesto testimonio asegura: "mi madre con artrosis en una pierna ha dejado de usar muletas, ya que no cojea ni un 5% de lo que lo hacía antes".

Recientemente, FACUA ha denunciado otros productos milagro similares, de la empresa Ion Balance, con sede en las Islas Baleares.

¿Qué es...?: La malaria


Ayer, 25 de abril, fue el Día Mundial contra la Malaria, así que como todavía no he hablado sobre esta enfermedad, aprovecho la ocasión para recordarla aunque nunca deberíamos olvidarla: al fin y al cabo, cada año, mata a 2,7 millones de personas (y de ellas, el 75% son niños).

La malaria, paludismo, fiebre cuartana o fiebre de los pantanos, es una enfermedad infecciosa causada por protozoos del género Plasmodium, transmitidos al hombre por las hembras del mosquito Anopheles


Se calcula que hay más de 1.600 millones de personas expuestas al vector (el  mosquito), aunque de momento sólo se ha descrito en unos 150países; de ellos, la mayoría se encuentran en el continente africano (donde la mortalidad es mayor a causa de las dificultades de tratamiento y prevención), mientras que en Europa el principal paludismo es el importado por viajeros, donde alcanza una mortalidad del 2-4%
Etiopatogenia:   Para todos los que alguna vez hemos estudiado esta enfermedad, lo verdaderamente “coñazo” es llegar a entender el ciclo biológico del parásito pero, ¡lo siento chicos!, toca hablar de él para que lo entendáis (aún así, podéis saltaros este apartado si queréis).
Aunque hay más de 100 especies de Plasmodium, sólo 4 afectan al hombre: P.vivax, P.malariae, P.ovale y P.falciparum (la más frecuente, más mortal y más resistente al tratamiento habitual). Si bien los ciclos biológicos son complejos y diferentes para cada especie, voy a limitarme a hablaros de P.falciparum, partiendo de la base de que, como todas las demás, diferencian dos momentos evolutivos diferenciados:
-          la fase asexuada o de esquizoogonia, que se desarrolla en el hombre (a la vez, se divide en extra e intraeritrocitaria)
-          la fase sexuada o esporogonia, que se desarrolla en el mosquito.
Los parásitos se introducen en el hombre a través de la picadura del mosquito, pasando a la sangre en forma de esporozoítos hasta alcanzar el hígado y penetrar en las células hepáticas (esta es la fase extraeritrocitaria). Transcurridos unos 8 días, la forma intermedia llamado merozoíto destruye la célula hepática y se libera de nuevo a la sangre, penetrando esta vez en los hematíes y iniciando clínicamente la enfermedad (fase intraeritrocitaria). Es en los hematíes donde se transformará primero en trofozoíto, madurará, se dividirá y destruirá el glóbulo rojo de modo que las formas jóvenes quedarán libres y penetrarán en nuevos hematíes, formando los esquizontes y repitiendo la fase intraeritrocitaria. Como dato a destacar de P.falciparum, añadir que coloniza a todos los hematíes (no importa su edad), cosa que explica su mayor virulencia.
Cuando la enfermedad se prolonga, es habitual encontrar en sangre alguna forma sexuada, que será sorbida por el mosquito tras una nueva picadura y así adquirirá éste el protozoo; en él, se producirá la maduración sexual formando la esporogonia que, una vez fecundada, pasará a las glándulas salivales y será inoculada de nuevo con otra picadura. Con esta generación alternante, asexuada en el hombre y sexuada en el mosquito, se cierra el ciclo evolutivo del parásito.
A nivel fisiológico de la enfermedad, hay que remarcar que los hematíes paralizados son más frágiles, transportan menor cantidad de oxígeno y cambian su estructura espacial, factores que determinarán la clínica. Los órganos más afectados serán el sistema nervioso central (SNC), el bazo, el hígado, el riñón y, en caso de embarazo, la placenta.
Clínica:
La incubación de la enfermedad es de 8-30 días, según la especie (tiempo que transcurre hasta la lisis de los primeros hematíes).
El cuadro está siempre dominado por la fiebre, de características específicas, aunque podemos diferenciar:
a)      Período prodrómico: fiebre, malestar general, cefalea, mialgia
b)      Período frío: fiebre, escalofríos intensos y sensación de frío extremo. Este período se repite en forma de crisis de 15-60 minutos.
c)      Período caliente o febril: fiebre de hasta 41ºC, rubefacción, piel seca, sed… Esta fase dura unas 2-6h.
d)     Período de lisis: gran sudoración, fiebre (aunque de menor intensidad), fatiga extrema, somnolencia. Dura unas 2-4h y vuelve a repetirse el proceso desde el período frío.
A todo esto, se le deben añadir complicaciones como hepatoesplenomegalia (agrandamiento del hígado y el bazo), confusión, disminución de consciencia, fiebre hemoglobinúrica por lisis masiva, insuficiencia renal, infartos en diferentes territorios, hemorragia masiva, meningitis, convulsiones, etc.
En nuestro medio, lo más habitual es que se presente como fiebre sin foco aparente, tras un viaje a una zona de riesgo.
P.falciparum, sin tratamiento, produce la muerte en unos 15 días.
Diagnóstico:
Para diagnosticar la enfermedad necesitamos observar a través del microscopio los hematíes, para comprobar que está infestado por protozoos. Esto se hace a través de dos técnicas llamadas "gota gruesa"o extensión de sangre periférica (que, además, permite diferenciar la especie).
 En caso de fiebre persistente tras un viaje, estas pruebas se repetirán las veces que haga falta, porque la malaria es la primera causa. Si estamos en un país endémico, cualquier fiebre es malaria hasta que demostremos lo contrario.
 
Tratamiento y prevención:
Aunque no siempre hace falta, en infecciones por P.falciparum se recomienda siempre la hospitalización. Una vez allí, trataremos la infección con antipalúdicos, aunque dependerá mucho de la resistencia del protozoo (y eso, en un primer momento, sólo lo podremos deducir según la zona en qué estemos o de dónde provenga el viajero). Aún así, en general, seguimos utilizando la cloroquina y/o la quinina.
En el caso de que vayamos a viajar a una zona de riesgo, debemos dirigirnos a nuestro médico para que nos administre una quimioprofilaxis (prevención en forma de medicamento).
Aún así, la mejor forma de prevención es, obviamente, evitar las picadas de los mosquitos, ya sea con repelentes o con algo tan sencillo como mosquiteras (y, idealmente, impregnadas de antipalúdico). Algo tan sencillo como esto, y a lo que millones de personas no tienen acceso.

Consultas externas XIII: semana 19-25 de abril

Esta semana llego a última hora, pero como siempre os traigo el repaso semanal a la blogosfera sanitaria. ¡Y cargadito de cosas interesantes!
  • Hace unos días leía en el blog de Eva acerca de situaciones que pueden asustar a los padres primerizos; entre ellas, se encontraba el llanto espasmódico. Casualidad de casualidades, el Dr.Santi nos explica qué es y por qué se produce.
  • ... y en el blog de Eva, nuestra madre contracorriente, una interesante entrada sobre cómo evoluciona la recuperación después de una cesárea.
  • Pero no os vayáis todavía de su blog sin echar un vistazo a esta entrada, y el poco tacto que a veces tenemos.
  • Una vez más nos hacemos evo de lo devaluada que parece estar la Medicina de Familia, y por eso nos llama la atención la entrada del Dr.Bonis y su reflexión acerca de la vocación que debería primar en esta especialidad. Desde aquí espero que, ahora que todos los MIR-2010 tienen su plaza, haya más casos como el de Laia...
  • ¡Turno del cine! Desde Medycine analizan esta semana Tender merciesCrazy heart, y Camino a la jungla. Y, desde Pediatría Basada en Pruebas, XXY.
  • La medicina está, a mi gusto, demasiado tecnicalizada actualmente: dependemos demasiado de caras y sofisticadas pruebas diagnosticas, y nos olvidamos de mirar, tocar, preguntar y escuchar al paciente. Pero si vamos más allá, nos dejamos también otras cosas por el camino (¡aunque algunas no muy agradables!); en Medicina Joven nos cuentan algunas.
  • Sin estetoscopio nos lanza una innovadora propuesta. ¿Se hará pronto realidad?
  • Las recetas cuestan dinero, ya no en medicamentos y tiempo, sino también en recursos: papel, tinta... pero, ¿sabéis exactamente cuánto papel podríamos ahorrarnos?
  • Menudo dilema ético-legal nos planteó esta semana Nebulina... No os perdáis su entrada ni los comentarios que suscitó.
  • ¿Conocéis el síndrome del cuidador? Para mi gusto, algo sobre lo que todos deberíamos estar avisados y intentar no pasar por alto.
  • Cuando roté recientemente por Pediatría, me harté de ver a niños con bronquiolitis aguda, una de las patologías más frecuentes en niños. Entonces, ¿por qué nunca se habla de ella? Si queréis conocerla un poco, pasad por aquí.
  • Los representantes de laboratorio o visitadores médicos, esos seres odiados por unos y amados por otros... lo que está claro es que no dejan indiferente a nadie, ni siquiera a Emilienko.
  • La historia clínica pertenece al paciente, si bien el médico está en su derecho a tener anotaciones subjetivas del caso que, en algún momento, puede no querer entregar o mostrar. ¿Qué hay de cierto en todo esto? Interesante reflexión de manos de Fran Sánchez aquí y aquí.
  • Como cada semana, algunos casos para haceros pensar un poco: uno por aquí, otro por aquí y un último por si tenéis ganas de más. 
  • ... y hablando de casos, aquí un ejemplo de que los médicos también tenemos nuestras cosas: Shora nos explica lo qué es "un caso bonito" y "un caso de libro".
  • El 13 y 14 de mayo se celebra en Palma de Mallorca el XII encuentro PACAP y el III encuentro de participación comunitaria para la promoción de la salud. Enrique Gavilán nos da más datos.
  • Nuevos datos sobre la preocupante obesidad infantil.
  • La Medicina Basada en la Evidencia no es todavía tarea fácil, y en Sin estetoscopio nos presentan la figura del evidencializador.
  • Conmovedora historia de manos de José Garzón, no dejéis de leerla.
  • Parece que estamos ante el primer gran estudio sobre el virus XRMV y la SFC. En Submundos tenéis la noticia completa.
  • Cada vez somos más los que nos unimos y lanzamos una lanza contra la homeopatía y demás supercherías: esta vez es el turno de Medicina Joven y Pediatría Basada en Pruebas.
  • La Dra.Arce nos ha preparado esta semana dos interesantísimas entradas: una acerca de la reanimación neonatal y otra sobre la retirada de la vacuna Rotarix.
  • El síndrome de Diógenes llega al mundo 2.0, o eso parece...
  • Y terminamos con el vídeo de la semana, que nos enseña que todavía hay buenas iniciativas:

¿Qué es...?: El glaucoma



En uno de los tests que os dejé hace ya tiempo, Seishi se hizo con el premio, que consistía en proponer un tema del que hablaros... Bastante tiempo después, aquí os dejo una entrada sobre el glaucoma, del que me pidió que os hablará: espero que os guste.
¿Qué es...?  
El glaucoma es una enfermedad ocular producida por un aumento progresivo de la presión intraocular (PIO), englobada en lo que los médicos llamamos neuropatía óptica (lesiones del nervio óptico).  Para entender cómo se produce, es importante hablar primero un poco del humor acuoso…
 Fisiopatología:
El humor acuoso es un liquido transparente que se encuentra en el polo anterior del ojo y sirve para nutrir y oxigenar las estructuras del globo ocular, manteniendo una presión constante (la PIO); esta presión depende del equilibro entre su formación y su drenaje... 
El humor se forma en los procesos ciliares y circula por la cámara posterior del ojo, pasando a la cámara anterior a través del iris, donde se reabsorbe en el ángulo iridocorneal para ser recogido en la circulación venosa. Sólo con esto, podéis entender ya que, teóricamente, el aumento de la PIO se puede producir por:
-          Aumento de formación del humor, superando la capacidad de eliminación
-          Obstáculo que impida el paso del humor acuoso de la cámara posterior a la anterior
-          Cierre o alteración del ángulo, que impida su reabsorción
Pues bien, normalmente el aumento de PIO se produce por una dificultad al salir. De hecho, clasificamos los glaucomas en:
a)      Primarios: aquellos donde no hay alteraciones del ángulo que justifiquen el aumento de PIO:
         -          Glaucoma crónico de ángulo abierto
         -          Glaucoma de ángulo estrecho: crónico, intermitente o agudo        

         -          Glaucoma congénito

b)      Secundarios: existe una alteración del ángulo de per se (una inflamación, neoplasia, depósito de pigmentos, etc.)

        Aunque todos comparten, más o menos, algunas características básicas, os hablaré específicamente del glaucoma crónico de ángulo abierto, por ser el más frecuente en nuestro medio, que se define como un aumento en la resistencia del drenaje, disminuyendo la filtración del humor acuoso y, por lo tanto, aumentando la PIO… y este aumento mantenido en el tiempo, es el que acabará produciendo una lesión en el nervio óptico.
 Clínica:
Se trata de un glaucoma bilateral, pero asimétrico, que se ve sobre todo en gente adulta (>40 años), aunque también se ven casos en jóvenes.
Todos los glaucomas se caracterizan por una pérdida del campo visual pero, en este caso, no aparece hasta fases avanzadas de la enfermedad, razón por la cual son tan importantes las revisiones,  ya que el oftalmólogo puede detectar algunos signos de glaucoma en las exploraciones, como son:
-          Un ángulo abierto y normal en el gonoscopio (una lente especial)
-          Una PIO >21mmHg (aunque no siempre estará aumentada) pero, muy característicamente, veremos que la presión cambia a lo largo del día (por eso hace falta más de una determinación)
-          Si la enfermedad está avanzada, se puede ver una lesión en la papila con un simple fondo de ojo (aumento de la excavación, asimetría papilar, desplazamiento nasal de los vasos, etc.)
La pérdida visual del glaucoma no es central: los pacientes pueden ver perfectamente el centro de la imagen a menos, claro está, que el glaucoma esté en últimas fases, donde se altera totalmente la visión.  Lo que nos explicará serán defectos de visión periféricos, que el médico puede explorar a través de una perimetría (una prueba específica que valora la visión periférica).





  Tratamiento y pronóstico:
La base del tratamiento es, obviamente, disminuir la PIO; incluso si la medimos y es normal, el ojo glaucomatoso se beneficiará siempre de esta disminución.
¿Y cómo lo hacemos? La primera opción es un tratamiento médico con gotas o colirios específicos (timolol, epinefrina…); con esto intentamos que la pérdida de visión no vaya a más pero, lamentablemente, no podemos pretender que el paciente mejore la visión que ya ha perdido.
La última alternativa es la cirugía, que se encarga de hacer una comunicación entre las dos cámaras del ojo, para que el humor acuoso se reabsorba mejor. El problema de la cirugía es que tampoco recupera la visión perdida y, además, tiene una tasa de fracaso bastante elevada (30-40%), razón por la cual sólo está indica en fases avanzadas (cuando el paciente ya es consciente de la pérdida de visión).
Así pues, es ésta una patología sobre la que hay que pensar, y por la que vale la pena no saltarse las revisiones oftalmológicas llegada cierta edad, pues la visión que perdamos no podremos recuperarla (pero sí podemos evitar perder más).

Y para no alargar demasiado esta entrada para los no-medicoblastos, tras el salto de página os dejo algunas cositas más y preguntas para los interesados.

Vuestra historia clínica: Asma... y embarazo (parte I)

Recupero esta sección, la vuestra, con una de las primeras historias que me llegó de manos de la mamá contracorriente favorita de la red, Eva. Su historia combina dos situaciones muy habituales, el asma y el embarazo, cada una complicada de por sí pero, ¿qué pasa cuándo suceden a la vez?, ¿cómo afecta una al desarrollo de la otra?

Como siempre es mejor una opinión directa, os dejo hoy con las palabras de Eva y, en esta semana, escribiré la segunda parte de esta historia con mi visión más aburrida "teórica". ¿Nos acompañáis?

Me diagnosticaron asma a los 12 años, aunque recuerdo que los síntomas venían de antes. A los 4 años tuve síndrome nefrótico, que remitió solo a los 10 pero, desde entonces, he tenido lo que se llama "una delicada salud de hierro". Soy la típica persona que coge cualquier virus que sobrevuele mi entorno y he tenido y tengo un montón de achaques, ninguno trascendental (toquemos madera), por lo que tengo toda la intención de vivir 100 años (o más). Aunque he pasado malas rachas con el asma, nunca lo he considerado algo tremendamente grave o preocupante. 
No sé si les pasará lo mismo a otros pacientes con enfermedades crónicas. En mi caso, me tomo mi medicación como una autómata y aun cuando tengo etapas peores, no reparo en ello. He aprendido a convivir con él y me permite llevar una vida casi normal. Así que nunca pensé que fuera a marcar mi embarazo de una forma tan radical.

Mi madre tuvo un embarazo fabuloso y un parto aún mejor, así que ese era mi referente. En los primeros meses no me cuidé especialmente, salvo, eso sí, dejar de tomar la medicación que tomaba del asma, por recomendación de mi alergólogo. Según mi neumóloga (profesional al que he acudido ahora, no antes o durante el embarazo) ese fue el error de base... Sea como sea, con 16 semanas de embarazo cogí unas anginas y de un día para otro (literal) me encontré con que no podía respirar, me dolía muchísimo el pecho, tenía una tos cogidísima y casi 38 de fiebre. Mal me debí ver porque cuando acudí a urgencias ya tenía bastante en mente que me iban a ingresar. Y así fue: estuve dos semanas ingresada en neumología, porque aquello no remitía ni con Urbasón (San Urbasón, hasta que me quedé embarazada!). Presuntamente fue una neumonía (presuntamente porque no se atrevieron a hacer placas para confirmarlo).

Me dieron de alta con 18 semanas de embarazo. El fisioterapeuta respitatorio me advirtió, junto con el neumólogo que me atendió allí, de que respiraba muy mal, que apenas movía el diafragma y que, probablemente, la cosa se pondría peor conforme avanzara el embarazo.y aumentara la presión. Las dos primeras semanas en casa fueron malísimas. Me ahogaba incluso sentada en el sofá y si no volví a urgencias fue para que no me volvieran a ingresar. Afortunadamente, con 20 semanas experimenté bastante mejoría y aunque seguía muy limitada (no podía ni frotar la placa, por ejemplo), por lo menos puede ir haciendo una vida medio normal. Me mandaron tomar Pulmicort, un medicamente que parece ser compatible con el embarazo pero que yo ya conocía de antes por el escaso efecto que a mí me hacía.

Sobre las 24 semanas empecé a ahogarme de nuevo y así continué hasta el final, añadiéndole achaques nuevos derivados del tamaño de la tripa. Tomaba ventolín a espuertas y si no tomaba más era por el niño. Para evitar tomarme un bote de diario me pasaba el día tumbada, mirando el techo. En ese momento empezaron a morir personas de la gripe A, empezando por una embarazada supuestamente asmática. Me encerré en casa; no quería ver a nadie, todos me parecían posibles portadores de virus. Estaba muy muy asustada. Ahora entiendo por qué hay gente que se deprime cuando padecen una enfermedad limitativa. No es tanto por la enfermedad en sí, sino por cómo te hace sentir. Sentirse enfermo, sentir que uno está completamente limitado por su enfermedad, es terrible. Y el asma...el asma es una de esas enfermedades de vagos, una enfermedad silenciosa, que nadie acaba de creer, lo que añade más sufrimiento si cabe. 
Con 36, casi 37 semanas, cogí un pequeño resfriado, a pesar de estar encerrada en casa. Lo suficiente para tener que volver a urgencias. La cosa se complicaba porque cuánto peor respiraba, más se aceleraban las contracciones y más rítmicas se hacían.  Creo que mi cuerpo estaba hasta el moño de aguantar esa presión tan grande en los pulmones y quería "soltar lastre" cuanto antes. En el hospital me ofrecieron ingresarme para valorar la evolución del asma y del embarazo, puesto que existían dudas ya más que fundadas de que no era muy recomendable que en mi estado hiciera el esfuerzo físico de dar a luz por vía vaginal. Perdí el tapón, tenía el cuello del útero borrado al 70% y la cosa parecía más que inminente. Clasificaron mi parto como de "alto riesgo" y no me dieron más de una semana para que se pusiera en marcha.

Ante la posibilidad de tener un parto traumático, que probablemente hubiera terminado en cesárea (nadie conoce más su cuerpo que uno mismo) decidí junto con mi ginecólogo programar una cesárea y no dar lugar a ponerme de parto. Fue la mejor solución. El resto ya lo sabeis porque ya os lo he contado.

Tres meses y pico después de aquello, estoy mejor, pero no estoy repuesta. Lo peor, insisto, no es  seguir tocada del asma. Lo peor, sin duda, es lo enferma que me he sentido, el miedo que he tenido por mi vida y la de mi hijo, lo limitadísima que he estado. Más de la mitad del embarazo del sofá a la cama y de la cama al sofá mina la autoestima de cualquiera y, desde luego, afecta a todas las personas del entorno, empezando por mi marido. Es un tema que me pone muy triste. Siempre quise tener una familia numerosa, al menos tres hijos, decía yo. Pero a día de hoy tengo muchísimas dudas sobre si quiero pasar otra vez por algo así. Y eso me hace sentir de nuevo enferma, pues nunca pensé que esto pudiera dificultarme un embarazo como finalmente lo hizo. Reconozco abiertamente que este tema me ha marcado muchísimo y, en cierta medida, me ha traumatizado. Voy a tardar en olvidarlo...
Desde aquí, Eva, muchísimas gracias por compartir tu historia, y por la naturalidad y sinceridad con que la explicas.

Conociendo mejor el cuerpo humano...

¡Así es! A pesar de que nadie ha dado las 10 respuestas correctas, por ser la que más se acerca (con ocho), Polilla es la ganadora de nuestro trivial. Como premio, nada especial, pero como siempre, puedes pedir cualquier cosa de la que quieras que se hable en el blog o, si lo prefieres, el tema de nuestro próximo trivial. De momento, aquí os dejo las respuestas...

1. Se considera que el raquis representa un vestigio del "hueso de la cola" de nuestros antepasados. Pero, ¿qué son los órganos vestigiales...?
a) Aquellos que no tienen la misma función que tenían al principio


2. La trompa de Eustaquio conecta el oído con la nariz. ¿Para qué sirve...?
b) Para mantener el equilibrio 

3. ¿Para qué sirve el apéndice? -otro órgano que podríamos considerar vestigial-:
a) No se conoce todavía


4. Los tendones se encargan de...:
c) Convertir la contracción muscular en movimiento óseo

5. Aunque menores en número que las exocrinas, las glándulas apocrinas de la sudoración:
b) Producen el olor corporal

 6. El bazo es un órgano que puede ser extirpado, porque...:
a) Su papel en el sistema hematopoyético es sustuído por el hígado


7. Las nuevas células sanguíneas se forman en:
c) La médula ósea

8. Los conos, células que podemos encontrar en la retina, se encargan de...:
b) Percibir el color

9. Las sinapsis cerebrales son responsables de...:
a) Transmitir las señales químicas entre neuronas


10. La úvula (o campanilla), nos ayuda a...:
a) Producir el sonido

MIR, días 23 y 24

Esta semana, poco os puedo contar de mi paso por la academia, y eso que tenía turno doble, y con dos especialidades bien difentes: Psiquiatría y Urología.

El viernes tocaba Psiquiatría, asignatura que precisamente estoy cursando ahora en la carrera. El día no amaneció con buen pie para mí, que no me sentía demasiado bien, aunque no quise agobiarme... Pero al acercarse la hora de ir a clase ya vi que aquello no mejoraba, así que decidí quedarme en casa. Y es que entre ir el viernes mal, a hacer una asignatura que no aprovecharía demasiado porque casi no tengo conocimientos previos o quedarme descansando para el sábado, que me tocaba día completo, pues escogí quedarme. Así que estudié en casa, tranquila, y me fui pronto a dormir.

El sábado me levanté mucho mejor, así que tras una ducha fui bien tempranito a por el simulacro 8 (¡cómo pasan los días!) que, aunque me pilló bien despejada y atenta, me pareció bastante más difícil que los anteriores; y debió serlo, o yo no estaba tan concentrada como creía, porque lo he corregido hoy y he bajado mucho respecto a los anteriores. Aún así, salí a comer con J durante el descanso y, ya por la tarde, a clase de Urología. Y no sé si es porque me dejé mi medicación en casa o porque no estaba del todo recuperada, pero el rato fue pasando y empezó a subirme la fiebre, a tener escalofríos y dolores terribles por todo el cuerpo... Así que muy a mi pesar aproveché el descanso, y cuando todavía faltaban 2h de clase, me volví para casa.

Ya véis, un fin de semana poco productivo, pero al menos hoy ya estoy mucho mejor (o eso parece). Eso sí, la semana que viene, aunque libre de academia, me espera ajetreada, así que no canto victoria por el momento.

Consultas externas XII: semana 12-18 de abril

Como ya os advertí, y muy a mi pesar, he dejado muchas entradas por el camino a falta de tiempo (y, sobre todo, a causa de mucho agobio por mi parte), así que sintiéndolo mucho retomo mi resumen semanal a la blogosfera a sabiendas de haberme dejado muchísimas entradas por enlazar. ¡Perdonadme!
  • En Anestesia2 nos traen otro de sus interesantes podcasts, esta vez analizando si la edad debe considerarse como factor de riesgo perioperatorio. Anestesitas o no, no os lo perdáis.
  • Enrique Gavilán nos resume brevemente los 15 temas que preocupan a la Sanidad actual. Aquí podéis encontrar las 8 primeros y, aquí, los restantes. Pero de todos ellos, ¿cuántos creéis que se resolverán en 2010?
  • Shora no deja de sorprenderme con sus fantásticas entradas acerca de la homeopatía y demás "chamanerías". En esta entrada nos plantea el por qué la sociedad da validez a que las farmacias vendan productos que hacen pasar por medicamentos.
  • ... y hablando de Shora y cosas que me sorprenden, quiero darle desde aquí todo mi apoyo, pues esta semana ha sido víctima de un plagio descarado en DeMedicina. Lamentable el hecho en sí, y más aún la respuesta que le han dado.
  • Al parecer, Actimel ya no es tan bueno como lo pintaban; al menos, eso se desprende de esta noticia, vía Saludyotrascosasdecomer.
  • Para todos los curiosos, un poco acerca de la malaria. Desde Medicina Joven, interesantísima entrada.
  • La crisis nos afecta a todos, sí, y hay que intentar ahorrar un poco... pero como nos cuenta Serena, hay cosas que no deberían reutilizarse.
  • Y, hablando de dinero, tal vez deberíamos meditar también en qué nos gastamos el dinero.
  • Caso nuevo en Medicina Interna, ¿cuál creéis que es el diagnóstico?
  • ... y otro más, por si os quedáis con ganas.
  • ¿Conocéis a Virginia Apgar? Si habéis estudiado Pediatría u Obstetrícia, seguro que sí; para los que no, en Anestesia2 nos la presentan.
  • Más cine desde la perspectiva pediátrica, esta semana reflexionando acerca de la adopción, gracias a Pediatría basada en la evidencia.
  • Muchas veces los médicos olvidamos que parte de nuestro trabajo es, o debería ser, explicar las cosas con claridad y responder a las preguntas de los pacientes de forma esclarecedora, para contribuir a su tranquilidad. En La tertulia, lo tienen en cuenta.
  • Cuando hablamos de suero de la verdad seguro que nos vienen a la cabeza multitud de películas y libros. Pero, ¿existe realmente?, ¿cómo funciona?
  • Profunda reflexión acerca del aborto y la nueva ley reguladora, de manos de MsConcu, no os la perdáis.
  • Y el vídeo de esta semana, dedicado a mis "queridos" fumadores...

La medicina se apunta a la moda del 3D

La medicina regenerativa cuenta con un problema de raíz muy difícil de solucionar: la imitación del original. Regenerar órganos o tejidos es una tarea sumamente compleja, que obviamente siempre dista de los tipos originales que se intentan reconstruir. No obstante, como suele ocurrir con estas ramas de la ciencia siempre trabajando en la vanguardia, lo que antes se creía ciencia ficción se torna realidad.

La compañía Invetech ha diseñado un artefacto de grandísima utilidad para la medicina regenerativa, el cual ha sido vendido a la compañía Organovo,  encargada de llevar a cabo investigación científica en el área de la reconstrucción de órganos y tejidos. Se trata de una suerte de impresora de tejidos humanos, la cual implica un avance científico de primer nivel.

El dispositivo lleva el nombre de 3D bio-printer, y cuenta con la capacidad de diseñar tejido humano en tres dimensiones, emplazando células en lugares concretos, exactos y específicos, haciendo posible así la reconstrucción (o construcción) de órganos del cuerpo humano, tanto para uso en transplantes como en reemplazos de órganos defectuosos todavía no inutilizados. Keith Murphy, representante de Organovo, ha declarado que "es un gran avance ya que proporciona, por primer vez, una plataforma tecnológica flexible, al permitir trabajar en diferentes tipos de tejidos".

“Los científicos y ingenieros pueden usar la 3D bio-printer para reemplazar células de casi cualquier tipo de tejido", asegura Murphy. "Por ejemplo, se podrán implantar células hepáticas preformadas o crear epitelio adyacente al existente después de un accidente".


De todos modos, los aplausos no  van para Estados Unidos, algunos recordarán que en Japón se diseñó algo parecido hace un poco más de un año. No obstante, las academias no suelen dialogar lo suficiente entre sí para el trabajo cooperativo, y lo que se inventó en una parte del mundo vuelve a re-invertarse en otro lado del planeta, con otros nombres y formas, pero con la misma función.


Fuentes: OjoCientífico y Live Science.

Antecedentes personales

Contacto