Pediatría, día 1

Primer día de clases, primer día de Pediatría, primer día en un nuevo hospital y primer... ah no! último curso!! (esperemos)

Esta mañana me he levantado 3 horas antes de las clases a pesar de haber dormido muy poco, ya que como tengo que hacer un montón de desplazamientos nuevos y no conocía el lugar, he querido ir con tiempo de sobras. Tanto, que al final he llegado una hora y media antes a clase!! El trayecto en bus no ha sido tan temible como temía, apenas 30 minutos, a los que hay que sumar el metro, el trasbordo y el ir de mi casa al metro... pero vamos, en total unos 40 minutillos que he invertido en su mayoría a leer.

Al llegar a clase, reconocimiento del lugar aprovechando que estaba sola: lavabos, biblioteca, cafetería, vistas desde la ventana con fotos de la salida del sol incluídas, aulas... un tiempo bien invertido!

Y mejor invertido aún cuando se ha presentado uno de los responsables del curso también antes de tiempo (todavía no he descubierto si es bedel, profesor o qué demonios :$) y dos compañeras, y el amable señor nos ha contado todo lo que queríamos saber y más: horarios, cotilleos, normas básicas... la guía de supervivencia de Sant Joan de Déu.

Las clases en sí, se me han hecho un poco pesadas. Bonitas, porque la Pediatría es algo completamente nuevo para todos y al menos yo lo cojo con muchas ganas de sacarle partido, pero estar 5 horas con temas introductorios se me ha hecho un poco tedioso. Cierto es que si hubieran empezado a todo gas me hubiese abrumado igual la mañana... supongo que el primer día siempre parece demasiado.

Así que esta semana sigo la misma dinámica: clases sólo de 9 a 14. A partir de la próxima, ya empiezan las prácticas y las clases en horario habitual, de 8 a 15. Habrá que tomarse esta semana como una degustación... Eso sí, estudiando ya desde hoy!